miércoles, 13 de mayo de 2009

Amalgama

Todos podemos contar con que al lanzar nuestras manos alguien estará a nuestro lado para tomarla, ¿pero porque mi mano no alcanza la tuya?, ¿Qué busco en el vacío?, -¿que?
¿Por qué yo soy el único cuyo cuerpo no posee aquel manto místico que aleja al frio?, ¿Por qué mi cuerpo se congela si ya esta cubierto?, que es esta sensación ¿Por qué me hace falta algo?.
Creía de niño que las mariposas solo volaban para nuestro deleite, hoy se que tienen donde posarse, de no ser así su existir habría sido vacío, ahora medan lastima y las odio, mean dicho que nunca vuelven a la misma flor, que no prueban dos veces el mismo néctar, que estúpidas, ¡malditas!.
Las flores de mi vida en su mayoría han sido de papel y no mean dado néctar alguno. ¿Será ese mi problema?, ¿Por qué mi flor sea ido?, ¿Por qué no a vuelto?, ¿Por qué maldita sea nunca a llegado?.
Me siento como uno de esos monstruos nocturnos (murciélago), estoy tratando de ver el color de las flores a pleno día, “no distingo”, yo solo escucho, “¿Por qué las flores no hablan?”.
E tocado flores reales que mean ofrecido su espacio pero las e marchitado al contacto. Mi alma esta sedienta, maldita y desposeída.
Ausencia, ausencia te odio porque me has vuelto padre, padre de amarguras y tristezas.
Te odio porque el frio que cubre mi cuerpo es más grande que mis fuerzas.
Te odio porque la tortura que me prestas, más sin látigos o cadenas es más dolorosa que el maltrato físico, que el dolor de una caída.
¿Por qué? ¿Por qué yo?, ¡no, no es así!.
¿Adonde e de ir para encontrar?.
¿Bastara con bolar y vivir?.
¡Estoy seguro de que no!, ya han amputado mis alas y robado mi vida.
¡Lo se!, “las mariposas solo viven un día”.
“Han de estar buscando una flor donde morir”

No hay comentarios:

Publicar un comentario